Quedamos.net

[valmont1974]

Me encanta escribirlos y leerlos, así que espero que a algún otr@ forer@ también le gusten y disfruten con ellos.

Si os apetece opinar podeis hacerlo sobre el relato o sobre la fantasía sexual en ellos descrita.

Ahí va el primero:

EL BAÑO
Un profundo olor a incienso la embargó mientras se sobresaltaba con el ruido de una cerilla.
- Como se había dejado convencer de aquello?, estaba desnuda, con los ojos vendados, en la habitación de aquel no tan desconocido.
Había llegado hasta esa situación siguiendo sus indicaciones, y allí estaba, con toda su piel erizada y a la espera...
Notó como el cogía sus manos y se sorprendió al ver que ¿la estaba esposando?, pensó en protestar pero no se decidió...
Silencio ¿donde estaba el? Se había apartado de ella y no se oía ningún ruido, y empezaba a darse cuenta de que estaba totalmente a su merced, totalmente indefensa, y extrañamente, eso la estaba excitando...
Notó como sus pezones se endurecían y comenzaba a brotar calor entre sus piernas, por dios, si ni siquiera la había tocado aun...
Un roce en su cuello provocó un escalofrío en su espalda. Solo había sido un suspiro y ya todo su cuerpo reaccionaba...
Otra vez la espera, porque no la tocaba ya?
De repente un beso furtivo en su espalda, seguido de una mano en su ombligo, esta vez si continuaba, besos en el cuello, sus manos, suaves y delicadas recorriendo su espalda, su barriga, sus piernas, pero no los pechos deseosos de un roce por lo menos...
Su boca se entreabrió para suspirar y para recibir un beso que no llegó, solo notó su aliento calido acercándose pero sin llegar a contactar con sus labios, y se apartó otra vez...
Porque la torturaba así? su excitación estaba al nivel mas alto, deseaba sentir mas, y mas, todo su cuerpo, y allí estaba, sin que nadie la tocara pero suspirando como si ya estuviera en la penetracíon...
Se calmó y su respiración se hizo un poco mas pausada... y cuando se seguía preguntando donde estaba, llegó. Un beso apasionado, dos labios intensos, sus lenguas se entrelazaron y con la sensación tan fuerte casi no sintió que unos dedos hábiles empezaban a jugar entre sus caderas...
Casi no podía respirar, sus suspiros salían por la nariz, ya que su boca estaba sellada por un beso largo, húmedo, intenso... y explotó en su primer orgasmo, increíble, un estallido que no cesaba... mientras unos brazos fuertes la sujetaban para no caerse...
Con suavidad, la tumbó sobre la cama y empezó a acariciar su espalda mientras ella intentaba que los latidos de su corazón se calmaran...
Caricias suaves por todo su cuerpo, que hacían que los latidos volvieran a aumentar...
Algo la rozó en la cara y no era una mano esta vez..
Como pudo echó sus labios sobre aquella carne palpitante, caliente y deseosa de su contacto... Quería devolver el placer recibido y con los ojos vendados y las manos atadas puso toda su pasión en juguetear con aquello, que a veces se escapaba juguetón hasta que al fin se paró, a su disposición..
Se oyeron por fin unos suspiros sordos de hombre, y ella se dio cuenta de que el también estaba muy excitado, hasta el borde del delirio, mientras había comenzado a pasar su lengua por su monte de venus...
Y entonces volvió a escaparse, eh? a donde iba? ahora, no , por dios...
Solo fueron unos segundos, aunque a ella le parecieron siglos, los que el tardó en separarle suavemente las piernas...
Su miembro se acerco despacio, notó su roce en su punto mas erógeno, rozándolo, haciendo que lo deseara cada vez mas....
Y por fin llegó, abriéndose paso sin dificultad, llenando todo su ser, sentía como si entrará por todos los poros de su piel, despacio pero intenso, con un ritmo firme...
Los gemidos de los dos empezaban a crear la banda sonora perfecta, los olores, las sensaciones, todo aumentaba al mismo ritmo, mas rápido, mas fuerte, mas dentro...
La noción del tiempo desparecía, la cama desaparecía, la habitación desaparecía...
Solo dos cuerpos acompasados, cada vez mas rápido, mas fuerte, mas intenso...
Los líquidos se mezclaron, los gemidos dieron el si mayor al mismo tiempo, los dos cuerpos se estremecieron totalmente acompasados, hasta en los temblores del orgasmo, parecía que se iban a ahogar....
Las respiraciones tardaron en reducirse, poco a poco se iban relajando y relajando y entonces ella abrió los ojos, y vio la espuma, las baldosas, las imágenes familiares de su baño la volvieron a la realidad, y volvió a pensar como aun años después se seguía acariciando recordando aquel increíble encuentro

[valmont1974]

Bueno, aunque el primero no ha tenido mucho exito en cuanto a respuestas, quiero pensar que algun@ habrá disfrutando leyendolo, así que os dejo otro:
ORTIGUEIRA
Me alejé caminando de la zona de tienda hacia la playa.
En la carpa que iba dejando atrás sonaba una canción de Depeche Mode, que me evocaba un figura lejana y cercana a la vez...
Sin darme cuenta me iba introduciendo en una noche estrellada, caminando por la playa con el ruido de fondo del rumor de las olas mezclada con el bullicio de las fiestas alrededor de hogueras...
Vagando sin rumbo, con mis pensamientos perdidos entre una sonrisa y una mirada pícaras, que nunca había visto de cerca, llegué a la otra punta de la playa, solitaria, serena...
Me senté a fumar un cigarro de maría y mientras me envolvía en su humo hipnótico, vi aparecer una figura...
No me sorprendió, extrañamente, sabía que estaría ahí..
Se acercó a mi y nos miramos, las palabras sobraban, nos conocíamos de siempre...
Cogió mi mano entre las suyas y la acercó a sus labios para besarla. Un escalofrío me recorrió toda la espalda mientras su boca se dirigía a la mía...
Fueron segundos lo que tardó en terminar el recorrido, pero se me hicieron eternos...
Llegó temblorosa, dubitativa como yo, pero duró poco, fue como si algo se hubiera encendido y empezamos a mezclar nuestras lenguas rabiosamente, el sabor metálico de su piercing se mezclaba con el deseado y anhelado de su saliva...
Era imposible despegarse de aquellos atractivos labios, no podíamos separarnos sin dejar un momento de besarnos, nos desabrochamos las camisas, y yo empecé a acariciar aquellos voluptuosos pechos, aquella maravilla que requería toda mi atención, pero no quería dejar de besarla...
Empecé a acariciarle los pezones, jugueteando con ellos y ella me copió, pellizcando también los míos, se me puso la carne de gallina, y sus gemidos empezaron a sincronizarse con las olas...
Quería recorrerla toda, no tenía manos para acariciarle todas las partes de su cuerpo, mientras mantenía una en sus pechos, la otra buscó el centro de sus piernas, tropezando antes con el pendiente de su ombligo...
Ella también me siguió y al momento nuestras manos estaban en caricias cruzadas, llevándonos a un punto sin retorno.
Mi dedo jugueteaba con su clítoris hinchado, mientras su mano bajaba y subía por mi miembro, que parecía a punto de explotar, nunca había estado tan grande, era insoportable, mientras nuestro beso eterno solo nos permitía suspiros nasales, que empezaban a superar el volumen de la música de fondo...
No pudimos aguantar mas y ella se sentó a horcajadas entre ese pedazo de carne palpitante, que aun se expandía mas al entrar entre sus húmedas piernas, dios, cuando empezó a moverse creí que todo iba a acabar pronto, tanto placer no era posible...
La agarré y me puse en pie como pude, y allí dibujando una sensual figura en la oscuridad nos amamos de pie, con las manos en el final de su espalda la levantaba arriba y abajo, con un ritmo ya frenético,imparable...
La tumbé, quería disfrutarla de todas las maneras posibles, nuestros labios sin separarse a pesar de los continuos movimientos, sus piernas se acomodaron a mi entrelazándome, sujetándome, llevándome mas dentro de ella...
El ritmo cada vez era mas intenso, mas fuerte, mas rápido, sin salida, sus gemidos se unían a los míos que ya eran casi gritos, sin palabras, solo un concierto de vocales al ritmo, y yo la empujaba con todas mis fuerzas, quería fundirme con ella, seguir y seguir...
Empezó a acercarse, ya venía, ella seguía conmigo, dios, esto era increíble, mis músculos empezaban a contraerse, no se podía resistir mas ese placer, y llegó... Sus piernas se agarrotaron sobre mi, su espalda se arqueo mientras yo la inundaba con mi semen, saliendo a borbotones, casi nos rompemos los huesos de la fuerza de nuestro abrazo mientras nuestros gemidos ya eran gritos sin aire....
Me desperté a la mañana siguiente, desnudo, con muestras de haberme corrido, sin saber si había sido un sueño o no, y empezando a soñar otra vez con un chica de preciosa sonrisa, mirada pícara y a la que conocía sin conocer...

[valmont1974]

A pesar de la falta de respuestas, aquí va otro. A alguien le apetece un regalo de cumpleaños como este?
REGALO DE CUMPLEAÑOS.

Había sido un día genial. Es lo bueno de cumplir años, que al menos ese día, todo es fiesta y regalos. Comer con su familia, ver las sorpresas y no tan sorpresas que le tenía, todo el mundo de buen humor. Aunque sea una tontería, días así compensan por otros muchos días no tan buenos. Siempre llenan de alegría el interior y sirven para recargar las pilas.

A pesar de lo bien que lo estaba pasando, deseaba quedarse con su chico a solas para otro tipo de celebración. Además el le había dicho que tenía otro regalo preparado para ella, pero que no se lo daría hasta la noche. Y la intriga le podía.

Se fueron de la casa familiar en el coche de el y ella notó que el camino no era el de siempre. Miró con cara de pregunta a su chico, que sonrió y le dijo: Hoy nos vamos a un motel, donde te espera tu sorpresa. Le dio un golpecito en el brazo acompañado por un “ya te vale”, pero no podía disimular que aquello le estaba gustando mucho. El no saber que le tenía reservado y la certeza de que sería algo sexual comenzó a excitarla. Una ligera humedad empezaba a abrirse paso entre sus piernas.

Reconoció el camino, y, al llegar se confirmó su intuición: se trataba de un motel del que habían hablado varias veces, de estos con jacuzzi, sauna y servicio de habitaciones. Pasaron la entrada donde les dijeron el número de su habitación. Era uno de esos moteles con garaje propio para cada habitación, por el que se accedía a la misma con total discreción.

Al apagar el coche, recibió un beso inesperado. Eso la encendió aun más y sus labios se abrieron de forma apasionada, para dejar entrar la lengua juguetona de su novio. Sintió como sus manos empezaban a recorrer todo su cuerpo, comenzando por su cuello, bajando a sus pechos. Un pellizco en su pezón le hizo soltar un suspiro y mirar a los ojos de su novio como preguntando porqué no salían del coche e iban a la cama. Pero el volvió a besarla y ya una de sus manos bajó hasta su falda para acariciarla. Se estaba poniendo muy a cien, y dejó de pensar para corresponder el tocamiento de su novio. Notar lo excitado que estaba el, hizo que se humedeciera aun mas, mientras los dedos ajenos comenzaban a empaparse al entrar en su coñito.

Ya no podía mas, quería salir del coche, e ir hacia la cama. Se separó de el, que con una sonrisa le dijo: Vamos para dentro, que allí te espera tu “tarta”. Algo en su tono le hizo notar que aun había más sorpresas…

Entraron en la estancia que se iluminaba con una luz tenue de un sinfín de velar repartidas estratégicamente y de repente una voz la sobresaltó:

- Hola, aquí tienes tu tarta.

El saludo venía de un cuerpo desnudo tumbado en la cama. Miró hacia su novio y la mirada de el y su sonrisa le confirmaron que aquella era su sorpresa.

- Como se que son las dos cosas que mas te gustan, la tarta la he elegido de nata y de…carne.- la risa de su novio la contagió y provocó unas carcajadas que fueron compartidas por el invitado inesperado.
“No hace falta que soples las velas, pero quiero ver como empiezas a comerte tu postre”. Con los nervios no se había fijado, pero al oír estas palabras, vio que el otro chico tenía nata por su cuerpo, formando un reguero desde sus labios hasta su miembro, que empezaba a mostrar la excitación del momento. También se dio cuenta de que no era un desconocido si no aquel chico del foro, Wilmot (¿Qué pasa? Ya que hago yo el regalo podré permitirme la licencia de meterme, no? Laughing Laughing Laughing Laughing ).

Tuvo un momento de duda, pero se dio cuenta de que la escena la excitaba como nunca, y empezó a desear sentir aquellos dos cuerpos para ella sola. Se acercó a Wilmot y lo besó en la boca para empezar a lamer la nata de aquella zona. El tacto de su barba y el sabor de aquella lengua nueva le gustó. Lo miró a los ojos y vio la lujuria en ellos, y comenzó a bajar con su lengua para degustar todo el camino de nata. Sus primeros suspiros comenzaron a oírse, y ella los correspondió cuando notó las manos de su novio en su culo, magreándolo mientras jugaba con su falda.

Llegó al punto álgido, y empezó a pasar su lengua por el blanco dulce que recubría aquel pedazo de carne que ya se mostraba en todo su esplendor. Se lo metió en la boca, disfrutando del sabor dulce y salado y del morbo de todo ello, cuando sintió la lengua de su novio en sus piernas. Le había levantado la falda y se abría paso hasta su pubis. La polla de Wilmot en su boca y la lengua de su chico en su coño. Comenzó a sentirse como la actriz protagonista de su película porno particular, y como tal hizo la mejor mamada que recordaba, con ansiedad, como si quisiera devorar todo lo que aquella situación le ofrecía.

La boca de el se apartó de su centro de placer, pero no tardó mucho en notar otra cosa. Su novio, ansioso de excitación, a punto de explotar, quería penetrarla. Solo con notar la punta en la entrada de su cueva, se dio cuenta de que tenía una erección como nunca, que debía hasta dolerle. Sacó el pene del otro un momento de su boca para decirle: Quiero que me la metas toda ya.

Y eso fue lo que necesitaba oír su novio, para entrar hasta el fondo. Sin piedad ni concesiones. Emitió un gran gemido y volvió a su tarea de ensalivar y devorar la polla de Wilmot que con los ojos entrecerrados no paraba de suspirar y decirle que siguiera. Se sentía mas sexual que nunca, el morbo y la lujuria inundaban todos los poros de su piel, mientras sentía el mete y saca brutal de su novio a su espalda, al tiempo que tenía una gran polla en los labios, y que manejaba el placer del otro amante.

Se oían gemidos, rechinar de cama, golpes de carne contra carne, palabras ininteligibles, suspiros, algún grito. Un concierto continuo que empezaba a subir el ritmo, cada vez más heavy, cada vez más duro, más fuerte, como los miembros allí erectos, como la penetración cada vez más salvaje. Notó que Wilmot se iba a correr y aumentó el ritmo de su mano y de su boca para recibir toda aquella leche, mientras su propio orgasmo se iniciaba al son de la follada de su chico. La corrida inundó su boca al mismo tiempo que su coño, que explotaba en un orgasmo imparable de vicio puro y duro, de sensaciones fuertes, de sentimientos totalmente sexuales. Los gritos de los tres surgieron al tiempo de sus corridas mutuas.

Se fueron apagando las respiraciones y comenzaron las sonrisas y las miradas picaras. Y su novio dijo: Espero que te gustase tu regalo hasta ahora. Pero he pagado por toda la noche la habitación, quieres seguir disfrutándolo?

[CuttlasCowBoy]

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